10.18601/16578651.n25.12

Reseña

Rosanvallon, P. (2018). Nuestra historia intelectual y política 1968-2018. París: Ediciones de Seuil.

Cristian Darío Castro Urrego*

*Candidato a Doctor en Estudios Políticos. Docente de Formulación y Evaluación de Proyectos, en la maestría de Gobierno y Políticas Públicas y en la especialización en Gobierno, Gerencia y Asuntos Públicos, Facultad de Finanzas, Gobierno y Relaciones Internacionales, Universidad Externado de Colombia, Bogotá (Colombia). [cristian.castro@uexternado.edu.co]; [https://orcid.org/0000-0002-2060-1888].

Para citar esta reseña:

Castro Urrego, C. D. (2019). Rosanvallon, P. (2018). Nuestra historia intelectual y política 1968-2018. París: Ediciones de Seuil. OPERA, 25, 235-237. DOI: https://doi.org/10.18601/16578651.n25.12


La obra del historiador Pierre Rosanvallon es de total vigencia, no solo para el público francés, sino para todo tipo de públicos interesados en temas como las ciencias sociales, la democracia, la modernidad, el liberalismo, el buen gobierno, así como para teorías sobre el Estado, los movimientos sociales y el sindicalismo, la revolución, el capitalismo y el neoliberalismo, la historia francesa, la ciudadanía y la legitimidad, los fenómenos de discriminación actuales, los cambios históricos y doctrinarios de las ideologías políticas, en particular aquellas referidas a la socialdemocracia y a la tensión entre izquierda y derecha, y el liberalismo social como corriente en la cual se suele encasillar el pensamiento político de Rosanvallon.

En esta reseña nos ocuparemos de una parte del pensamiento de Rosanvallon bajo el recuento sucinto del libro titulado Nuestra historia intelectual y política 1968-2018, el cual salió a la luz en el año 2018. Esta obra es un esfuerzo por dar cuenta del proceso de consolidación de la modernidad, sobre todo en Francia, donde la idea de la emancipación del individuo y el sujeto político son centrales. La obra de Rosanvallon se estructura en cuatro partes que develan los fundamentos de la transformación de las ideas políticas en Francia, con énfasis en el movimiento de Mayo de 1968 y en los postulados políticos más recientes de la vida intelectual francesa. Resalta de su obra el recuento e impacto social de varias ideologías, pero conservando una visión actualizada de la matriz intelectual y política de nuestros tiempos en el siglo XXI.

En particular, la modernidad, en la visión de Rosanvallon, es una modernidad política y en consolidación gradual en la que la historia de las ideas referidas a la emancipación pasa por comprender tres momentos o edades fundamentales: uno, las revoluciones occidentales, en especial la francesa y la independencia de Estados Unidos; dos, las revoluciones capitalistas industriales y las revoluciones marxistas que marcaron una trayectoria desde el siglo XVIII hasta inicios del XX; y tres, la edad de la emancipación entre 1968 y 2018 (p. 20) como una época de virtudes y altibajos pero con un sentido intelectual de esperanza ante la vigencia siempre importante de los ideales referidos a la libertad y la solidaridad.

Dentro de los problemas de la última edad de emancipación, Rosanvallon señala el retroceso intelectual de los años ochenta y noventa, unido a la disminución de la fuerza política de los movimientos de izquierda, y la emergencia de los más recientes movimientos populistas y nacionalistas de marcada tendencia radical ampliamente criticados por el historiador francés.

En el libro, Rosanvallon se preocupa por la desvalorización de la democracia, la dislocación de la economía y la sociedad capitalista, y la mala hora de la política por la irrupción del populismo. No obstante, esas preocupaciones que tienden a forjar escenarios pesimistas en la política actual son abordadas por el autor del libro a la luz del principio de voluntad para invertir o reversar la tendencia fatalista del mundo intelectual de nuestro tiempo (pp. 11-12).

Dentro de esa visión positiva del mundo intelectual y político provista por Rosanvallon se presentan los acontecimientos y significados del movimiento de Mayo de 1968 como un punto focal de esperanza social, de renacer cultural y como un ciclo nuevo de modernidad (p. 14).

Para el caso francés, ese Mayo de 1968 no significó necesariamente un triunfo de la izquierda política tradicional según Rosanvallon, sino más bien configuró el despertar de una revolución social, cultural y política de los movimientos sociales, sindicales, estudiantiles y artísticos preponderantemente, los cuales renovaron o refrescaron la participación popular pidiendo cambios de fondo en la estructura de la manera de operar de la Modernidad y la vida política. Este fenómeno es llamado por Rosanvallon el surgimiento intelectual de la "segunda izquierda", basado en un proceso de repensar el cambio social (pp. 14-15).

Del libro de Rosanvallon se interpreta cómo el pensamiento neoliberal arrasó los fundamentos del Estado social de derecho y concentró la atención del mundo social y académico en los años ochenta; lo anterior le hizo daño a los pretéritos proyectos colectivistas de los años setenta que depositaban la esperanza en nuevas formas de comprensión de la propiedad, de lo político y de la vida social, entre los cuales podemos citar el proyecto de la "autogestión", el de la "inspiración autonómica" (p. 17), o el proyecto del estatismo social de orientación reformista (p. 19) surgidos como nuevas formas del pensamiento económico y político al calor de los ideales de Mayo de 1968. El proceso retardatario de los años ochenta es expresado por Rosanvallon como un fenómeno que desvalorizó las iniciativas o proyectos mencionados basados en la revolución social y democrática de muchos países del orbe, especialmente de Francia.

El libro explora el rezago y desinflamiento de la segunda izquierda política y la débil o, quizás, la tímida construcción intelectual de los años ochenta, noventa y 2000 en el sentido de no ofrecer una contrarreferencia sólida frente al neoliberalismo y al realismo pragmático dominante en aquellas épocas. Lo anterior es llamado por Rosanvallon como la "radicalización de la modernidad" (p. 23).

Finalmente, el autor evidencia cómo en nuestro presente más inmediato el neoliberalismo ha adoptado la forma de un capitalismo de la innovación, de un individualismo de singularidad y de un declive del debate, de la elección y del desempeño de la democracia en nuestras sociedades (pp. 389-411). En los marcos de análisis de Rosanvallon despunta la idea de recomponer el pensamiento político basado en los aciertos intelectuales del pasado, pero pensando en redefinir el presente y el futuro sobre bases sólidas alusivas a crear comunidad política y académica y a repensar los problemas actuales referidos a diferentes formas de populismo a través de traer a cuento de nuevo los valores democráticos basados en la emancipación del sujeto y la sociedad.